La membrana asfáltica es un material compuesto y de construcción compleja que se usa como una capa de impermeabilización al agua y a la humedad en la construcción, especialmente en los techos. Por lo general, se vende y provee en rollos, y se componen de varias capas, siendo una de ellas una capa de refuerzo, otro antiadherente y otra que obra como terminación de superficie de protección e impermeabilización de la capa de asfalto.

Se ha utilizado desde hace muchos años y hoy en día, al ser víctimas de un evidente cambio climático que se traduce en lluvias y vaguadas más continuas; es imprescindible contar con una membrana asfáltica actualizada.

En Chemical queremos contribuir a mejorar tu calidad de vida diciéndote todo lo que tienes que saber sobre el actual estado del mercado de membranas y también queremos contarte un poco sobre los distintos usos que le puedes dar a ese material que siempre sobra.

Aprende a proteger tu casa ¡comenzando por el techo!
Las filtraciones son un problema muy grave dentro de las casas, por lo general suelen observarse subir por las paredes como un mal allí donde las tuberías han colapsado. No obstante, otro tipo de humedad muy común es aquella que se desliza de manera silenciosa por la parte superior de nuestras paredes.

Otro gran uso de la membrana asfáltica
Las palabras “así en el cielo como en la tierra” nunca habían tenido una connotación tan literal como es el caso de la membrana asfáltica. Y es que otro de sus grandes usos para mejorar nuestra calidad de vida es: en el jardín.

Aunque se utiliza una membrana con las características antes mencionadas; también se agregan elementos muy importantes en el suelo del jardín para lograr la mayor impermeabilización sin afectar la salud y desarrollo de nuestras plantas.

El uso de membranas de esta forma se hizo muy popular cuando estalló la moda de los techos verdes, puesto que en muchos centros comerciales y edificios importantes; las personas más adineradas comenzaron a construir casas e incluso complejos residenciales enteros a los que muchas veces sólo se accede a través de un helipuerto.

Para crear un ecosistema verde de hermosos jardines, se agregaron los siguientes dos elementos: drenaje y geonet.

Con esto se logró una profundidad de techos de hasta 20 centímetros y una perfecta circulación del agua que no generaba hongos.